domingo, abril 22, 2007

Adios Shei


Tu alma llenó las nuestras, llegaste cuando aún llorábamos, y ahora nos estamos despidiendo, se que en algún lado nos encontraremos, tu correrás por aquellos prados con los cuales soñabas cuando movías tus patitas en las siestas de otoño, yo correré por los míos. Amiga, tu lengua no solo curó tus heridas, tus patas no solo caminaron tu camino, tu compañía fue un regalo que dios nos dejo al umbral. Aún puedo vernos, fuiste mi almohada y yo fui le tuya, cuando descansábamos en manada. Nos cuidaste, nos protegiste, nos amaste.
Nos veremos del otro lado compañera, se que me esperarás al lado de la puerta, como lo hacías en las madrugadas en las que volvía al hogar desde las lejanías. Ahí correremos y nos tiraremos al suelo para mordisquearnos, para saltar, ya sin las limitaciones que tu enfermedad y el tiempo, se encargaron de imponerte. Ahora fue tu tiempo, para el nuestro resta, pero sé que ahí estarás guardiana de nuestro corazón.
Hasta siempre hermosa, hasta siempre.

1 comentario:

Ariel castillo dijo...

Que buenas frases y emociones expresadas en letras...